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Uñas débiles y quebradizas: causas y soluciones a la mano.

Uñas débiles y quebradizas: causas y soluciones a la mano.

Se quiebran de la nada. Se escaman. Se agrietan. Se vuelven muy finitas. ¿Se resuelve todo con un fortalecedor?

A veces se trata de indagar y buscar la causa para encontrar la solución.

Cuando nuestras uñas están bien, su apariencia es lisa, no tienen marcas o surcos. Su color es rosa y su consistencia uniforme. No presentan manchas ni decoloración.

¿Cuándo debemos pensar que algo sucede? Justamente, debemos prestar atención cuando algo cambia con respecto a lo que se considera un desarrollo y aspecto normal.

Porque si algo cambia, tiene que ver con causas internas de nuestro organismo y nuestras uñas nos alertan de que algo no estaría funcionando bien.

Diferentes causas pueden estar afectando la salud de tus uñas. Una de ellas es la alimentación.

Presta atención a las siguientes alarmas:

-Cambios de color (en toda la uña o una línea oscura debajo).

-Cambios en la forma (uñas curvadas).

-Si se vuelven gruesas o demasiado delgadas.

-Si la uña se separa de la piel.

-Sangrado, hinchazón, dolor.

-Crecimiento pobre o nulo.

Lima electrónica de Beurer. Limado preciso con luz luz led para alcanzar el detalle.

¿Cuáles son las causas más frecuentes? Unas tienen que ver con hábitos, otras tienen que ver con la salud. En general, la causa principal es la alimentación. Te contamos algunas para que las tengas en cuenta, puedas corregirlas o consultar con un dermatólogo de confianza y encontrar tu tratamiento adecuado, si notas que las alarmas son demasiado llamativas o quieres sentirte más segura con un diagnóstico más preciso.

Las 6 causas más frecuentes.

1-Mala alimentación.

Una mala alimentación nos priva de vitaminas esenciales, especialmente la biotina, vitaminas del grupo B y vitamina D. Sucede con las dietas muy estrictas o poco equilibradas. También, la falta de hierro puede producir uñas cóncavas.

Muchas veces, un suplemento ayuda a compensar ese déficit. Consulta con tu profesional en salud de confianza.

2-Exceso de lavado de manos.

El lavado de manos frecuente con agua caliente, y más en estas épocas, puede provocar deshidratación cutánea y ungueal que se traduce en uñas más débiles y quebradizas con mayor facilidad para romperse.

3-Estrés

Produce líneas o surcos transversales, que indican que el crecimiento se ha detenido. Puede deberse a estrés, pero también a períodos de mucha fiebre o procesos de quimioterapia.

4-Contacto con sustancias abrasivas

El uso de lejía (lavandina) o el amoníaco, detergente, y otras sustancias abrasivas que utilizamos a diario, son muy agresivas para nuestras uñas. Es por eso que se recomienda siempre el uso de guantes al realizar actividades donde estén presentes dichos productos.

5-Morderse las uñas.

Este hábito hará que se debiliten, se retarde su crecimiento y si crecen, lo hagan de manera inadecuada. Además, al mordernos, llevamos bacterias que están debajo de las uñas a nuestro organismo y eso no es saludable pues podría traer otras complicaciones.

6-Relacionadas con la salud.

Los cambios en las uñas pueden deberse a problemas de hipotiroidismo, infecciones por hongos, diabetes, osteoporosis, problemas hepáticos y renales, psoriasis ungueal. Un dermatólogo sabrá distinguirlas.

Accesorios para limar, alisar y pulir. Dos niveles de velocidad.

Soluciones a nuestro alcance.

Podemos ayudar a nuestras uñas tomando algunas medidas.

-Elige una crema hidratante para maños y uñas.

Hay cremas específicas que fortalecerán tus uñas al mismo tiempo que hidratarán tu piel.

-Removedor de esmalte sin acetona.

Para quitar tu esmalte, prefiere un removedor que sea menos agresivo. Esto también cuenta.

-Lavado de manos.

Hazlo con jabones suaves de PH neutro y aplica crema hidratante tras el lavado, haciendo foco en la cutícula y en la piel alrededor de la uña.

-Belleza de uñas, largo.

Cuando llegue el momento de limarlas, y si tienes uñas que tienden a romperse, evita limarlas demasiado en los laterales. Es en los laterales donde normalmente se rasgan y se producen las roturas. Evita también las uñas demasiado largas, prefiere un largo mediano a corto, al menos hasta que logren recuperar fuerza.

Para que tu limado sea perfecto, en Beurer, en nuestra línea de manicuría, contamos con una lima electrónica de uñas para manos y pies. Con accesorios para limar, alisar y pulir, y dos niveles de velocidad para que ajustes según la necesidad. Además, trae incorporada una luz led para alcanzar el detalle que tanto buscas o para limar tus uñas en lugares cuya luz ambiente es muy difusa.

-Trucos caseros.

Para fortalecer tus uñas, no sólo son buenos los fortalecedores disponibles en el mercado. Si no tienes uno, puedes probar agregando dos cabezas de ajo machacado dentro del esmalte transparente (¡como lo oyes!) y usarlo como base. También el aceite de oliva es muy bueno. Sumerge tus uñas en aceite de oliva templado, tibio (¡ten cuidado!) durante 20 minutos. Luego lávalas y sécalas bien. Prueba una semana y chequea resultados.

En Beurer, nuestro único deseo es que te encuentres bien.

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